La crónica de Marina Vidal, nuestra arquitecta del Departamento Técnico, miembro de la organización y coordinadora en el festival.
Este octubre se ha celebrado la 14.ª edición del festival de arquitectura 48h Open House BCN. Como cada año las cifras del festival no hacen más que incrementarse, se han superado los 76.500 visitantes con la ayuda de más de 1.000 voluntarios.
En esta edición han abierto puertas 195 edificios, de los cuales un 40% han sido novedad, situados no solo en la ciudad de Barcelona, sino también al resto de ciudades invitadas cómo son Hospitalet de Llobregat, Sant Joan Despí, Vilassar de Dalt, Santa Coloma de Gramenet, Badalona y Sitges.
Además de los ya clásicos del #openhouse como La Prisión Modelo, Arc de Triunf o Torres Venecianes, hay que destacar que este año una importante parte de la programación ha girado en torno a la figura de Lluis Domènech y Montaner en conmemoración del centenario de la muerte del arquitecto. Han abierto puertas edificios normalmente cerrados a la ciudadanía, como la Casa León Morera, situada a «Quadrat d’Or» de Paseo de Gracia; el Palacio Montaner, donde se sitúa la delegación del gobierno; o el «Castell dels Tres Dragons» de «La Ciudadella», edificio con un futuro incierto desde el cierre del Museo de Ciencias Naturales en 2010.
Foto 1. Interior de la Casa Lleó Morera, situada en el «Quadrat d’Or» de Passeig de Gràcia.
Foto 2. Escalinata y lucernario del Palau Montaner, actualmente la Delegación del Gobierno en Barcelona.
En la zona del ensanche encontramos algunos de los edificios más visitantes de esta edición del festival, como Casa Juncosa, construida por Salvador Vinyals y rehabilitado por GCA arquitectos, o el recinto de Escuela Industrial, con un total de 5 edificios abiertos, entre ellos la Capilla del Colegio Ramon Llull, la Escuela del trabajo o el Paraninfo, todos edificios de Joan Rubió i Bellver.
Foto 3. Detalle del mosaico de uno de los pasadizos de la Casa Juncosa, arquitecto Salvador Vinyals.
Foto 4. La Escuela del trabajo del arquitecto Joan Rubió i Bellver.
Foto 5. Detalle del Paraninfo, del arquitecto Joan Rubió i Bellver.
Como coordinadora de «l’Eixample» es un placer poder formar parte de este equipo, sin la energía y entusiasmo del equipo, sería imposible salir adelante un festival de estas dimensiones. Para conseguirlo es necesario un trabajo de meses de contactar propiedades, hacer visitas previas, gestionar el voluntariado, formarlos… Todo y el esfuerzo, la recompensa de poder abrir todos estos edificios es impagable.
Imágenes de Marina Vidal, GTA Europa.
